- publicado 02.04.2021
- por Cuenqueando
Por qué son típicas las Torrijas de Semana Santa
Llegan estas fechas y una de las recetas imprescindibles de la Semana Santa son las Torrijas. Y es que para gustos las torrijas!!
En mi casa mi abuela simepre le gustaban las de vino, aunque a los pequeños siempre nos hacia una fuente mojadas en leche que, nunca sabiamos como, se acababan demasiado pronto. La tarde de hacer torrijas era una especie de ritual porque mayores y pequeños nos arremolinabamos en la cocinilla con la abuela esperando ser los primeros en probarlas. Se nos hacía la boca agua desde que empezaba a cortar aquellas rebanadas de pan.
¿Pero de dónde surge la tradición de comer torrijas en Semana Santa? Es un postre muy sencillo a base de pan blanco, leche y azucar o miel en sus primeros tiempos por lo que ya tenemos noticias de él en el siglo IV. En el "De re coquinaria" aparece una receta en la que se remojaba pan sin corteza n leche y se freia, añadiendole después miel por encima. Este dulce pasó a ser un alimento muy completo y de fácil digestión para enfermos y parturientas, por lo que pronto se extendió cuidar a las madres recién paridas con este plato dulce, además como de lo que se como se cría se creía que las madres tendrían más leche para sus bebes.
Las torrijas se relacionan con los nacimientos y empiezan a ofrecerse no solo a la reciente madre sino a los invitados que visitan al recien nacido. Tanto se vincula a este hecho que, en el Diccionario nuevo de las lenguas española y francesas de 1705, aparece la defición de torrijas como "rebanadas de pan frito y untado en miel que dan a las mujeres paridas en España". Durante el siglo XIX y el auge de la clase media, estos manjares se fueron abaratando pasando a la mesa de forma cotidiana.
Que sea un dulce típico de la cuaresma responde a que lo cotidiano de sus ingredientes hace que sea compatible con los preceptos de la cuaresma y pasase a ponerse de moda para estas fechas. Lo que hace que estemos deseando que se aproxime la Semana Santa para hacernos una fuete de torrijas. Y que e vamos a hacer si nos encanta seguir las tradiciones.
¡Dulce Semana Santa cuenqueadores!