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- publicado 31.10.2021
- por Cuenqueando
El Nacimiento del Río Cuervo
El Río Cuervo es un subafluente de la cuenca hidrográfica del Tajo que, curiosamente nace muy cerca de las fuentes del Río Júcar, tanto que solo la Muela de San Felipe separa ambos nacimientos. Esta zona montañosa de la Serranía de Cuenca, de hecho, rompe las vertientes Atlántica y Mediterránea, con lo que, pese a la cercanía del nacimiento de ambos ríos, las aguas que los nutren se separan hasta terminar vertiendo en puntos tan opuestos como Lisboa y Cullera respectivamente. Pero el dramatismo de la orografía de la zona, no solo nos dejará esta curiosidad, sino también algunos de los paisajes más espectaculares y de los ecosistemas más peculiares del Parque Natural. Este es el caso del entorno del Nacimiento del Río Cuervo, lo que le ha valido el reconocimiento de Monumento Natural. Desde Cuenqueando os invitamos a descubrir este espacio privilegiado.
Lo más espectacular y llamativo del monumento natural del Nacimiento del Río Cuervo son sus cascadas de agua, estas están originadas por una Toba calcárea natural que ha actuado a modo de presa del río. Las cascadas, fruto del desbordamiento de la Toba, están tan solo a unos cientos de metros del aparcamiento y, desde el mismo, hay perfecta accesibilidad para carritos de bebés o sillas de ruedas. Estas cascadas nos ofrecen un sorprendente juego de agua, sobre todo en invierno y primavera. Desde aquí aun nos quedará algo más de medio kilómetro hasta el propio nacimiento del río, lo que incluye una empinada cuesta para salvar las cascadas. En total, la ruta es de escasos dos kilómetros y se puede realizar en una hora.
El Río Cuervo ha generado en torno a su nacimiento un ecosistema muy peculiar, con una flora específica, una curiosa mezcla de vegetación de montaña y fluvial. Aquí prolifera el Pino Silvestre, pero también encontramos numerosos ejemplares de Acebo, Tejo o Boj, y todo un completo ecosistema de vegetación de riberas. Además, dependiendo de la época del año, también podremos observar más de una docena de especies diferentes de pequeñas Orquídeas. La biodiversidad animal es también elevada en este entorno y los tipos de aves e insectos que lo pueblan varía a lo largo del año. Es fácil poder observar ejemplares de pequeños pajarillos como el petirrojo y de diferentes tipos de mariposas.
Si te gusta lo que lees, más te gustará sentarte frente este monumento natural que es un auténtico espectáculo de la naturaleza en la Serranía de Cuenca. Así que te invitamos a que en tu próxima escapada a Cuenca visites este asombroso lugar, y no te pierdas nuestra recomendación de los 10 Lugares imprescindibles de la Serranía de Cuenca.